Entre las profesiones que existen, pocas son en las que puedes hacer tanto bien a la juventud y a nuestra nación, como la de COACH.
Tiene lo del MAESTRO, enseña con la inteligencia y la conducta.
Tiene lo de un ARTISTA, inspira con el ejemplo.
Tiene lo del ARQUITECTO, que con audacia y prudencia, sienta las bases de los destinos que se construyen cerca de uno.
Tiene lo del INGENIERO, construye los caminos y puentes para poder andar en la vida.
Tiene lo del ABOGADO, debe ser defensor de los débiles y de todas las causas nobles y sublimes.
Tiene lo del PSICÓLOGO, trabaja con la mente, la voluntad y la conciencia de los jóvenes.
Tiene lo del MÉDICO, debe proteger y velar por la salud de los jóvenes.
Tiene lo del SACERDOTE, trabaja con el corazón, el espíritu y el alma de los jóvenes.
Tiene lo del PADRE DE FAMILIA, debe respetar y amar profundamente a los jóvenes como si fueran propios y pensar en la calidad del bien que está en nuestras manos y que obliga a reflexionar en todo el daño que uno puede hacer si no se trabaja sujeto a ideales sublimes y luminosos.”
Coach Anastasio “Látigo” Gerner